Recomendaciones de actividad física. Situación actual según el género y el nivel socioeconómico

Para lograr la planeación y promoción de programas de actividad física que combatan de manera efectiva el  preocupante nivel de sedentarismo que mantiene la población mundial y específicamente la población Colombiana; se requiere realizar estudios detallados de las tendencias de actividad física, las preferencias, posibles limitaciones, uso del tiempo libre, entre otras variables. Un equipo conformado por representantes del departamento de salud pública de la Facultad de Medicina de la universidad de los Andes de Bogotá y del Departamento administrativo del deporte, la recreación, la actividad física y el aprovechamiento del tiempo libre, Coldeportes de Bogotá, adelantaron un estudio en el año 2010 cuyo objetivo principal era determinar el nivel de cumplimiento de las recomendaciones de actividad física en el marco del tiempo libre, la práctica de caminar o montar bicicleta como medio de transporte y la tendencia de realización de actividad física discriminado según el nivel socioeconómico y el género.

Antes de mencionar los resultados del estudio citado, es importante recordar que las recomendaciones mínimas de actividad física en uso del tiempo libre según la OMS son de 150 minutos de actividad moderada a la semana, o 75 minutos semanales de actividad física vigorosa (exigente), o la combinación efectiva (actividad física moderada y actividad física exigente) que le equivalga, además se recomienda caminar o montar bicicleta como medio de transporte durante 150 minutos semanales.

Teniendo claras las recomendaciones de la organización mundial de la salud (OMS) a continuación se presentan algunos de los hallazgos del estudio al que se refiere el presente artículo. Se encuentra con preocupación que la práctica de actividad física durante el tiempo libre bajo las recomendaciones de la OMS no alcanza al 35% de la población masculina y el 20% de la población femenina del total de la muestra tomada a nivel nacional para Colombia, se evidencia una mayor tendencia al sedentarismo en mujeres a nivel general y la población de estratos socioeconómicos 1,2 y 3 y finalmente el uso de la bicicleta o caminar como medio de transporte es una práctica más común en la población de estratos socioeconómicos más bajos.

Es claro que el sedentarismo tiene una evidente incidencia en la posibilidad de sufrir enfermedades de tipo cardiovascular, respiratorio y osteomuscular, entre otras. Conviene entonces lograr conciencia de alcanzar si quiera el mínimo de actividad física recomendada para el cuidado propio de la salud. Recuerde que existe gran variedad de posibilidades para llevar una vida más activa y que no se limitan exclusivamente a asistir a un gimnasio o tomar sesiones estrictas de entrenamiento.

Si desea leer el informe completo del estudio visite el siguiente link:
http://www.revistabiomedica.org/index.php/biomedica/article/view/2258/2526